miércoles, 31 de agosto de 2016

Lobos con piel de cordero


Me cabrean los lobos con piel de cordero. En el Congreso hoy se han juntado un buen puñado de esos lobos que pretenden convencernos reiteradamente de que van a cumplir con responsabilidad y justicia con sus obligaciones. Una vez más demagogia, tartamudean, lenguaje no verbal lleno de incumplimientos de pactos, indecisión, falta claridad en ideas que además no han sido meditadas, hablan y sus ojos miran hacia abajo, algunos mienten. En política, al menos en la que yo entiendo y respeto, no hay cabida para la opinión, para la duda, no pueden estar encima de una tribuna ni haciendo chistes, ni diciendo nada. Se suceden halagos, insultos, vaivenes gallegos, viajes en el tiempo buscando que el tiempo pase y no exista, para poder burlarse una vez más. Mientras, me pregunto ¿de qué coño se ríen  en sus escaños?. ¿por qué aplauden? ¿qué aplauden?. Aplauden para llenar el tiempo con egos y humo. Aplauden para que se omitan esas palabras que deberían ocupar ese absurdo tiempo de aplausos injustificados. "Algunas cosas van bien, otras mal; algunas cosas las hemos hecho bien otras mal; algunos somos buenos, otros malos" y con estas afirmaciones justifican su proyecto político. Hoy he tenido momentos en los que he dejado de creer en que la democracia puede cambiar este mundo, debe de ser como lo de creer o no en dios. Quizá tenga que esperar a la resurrección eterna... 

miércoles, 17 de agosto de 2016

No ser simplemente máquinas

Fuerte de San Cristobal, sólo miro yo. Foto de Mariano
Decía Sartre que en nuestro acto de elección, como individuos, estamos eligiendo a toda la humanidad. Sería como decir que cuando elegí ser filósofa o madre o carpintero, es porque consideré que era la mejor elección posible, sería absurdo pensar lo contrario, cuando la que he elegido soy yo!. Y desde el momento de mi elección condicioné a toda la humanidad en una especie de imitación a ser todos filósofos, madres o carpinteros, porque era la mejor elección. La mayoría estamos acostumbrados a ser imitadores y repetidores, ni pizca de originalidad ni creatividad. Ser espectador es un hábito asumido debido a nuestra sumisión a cualquiera de los sistemas que nos rodean. Mirar y repetir no lleva a ningún lugar, simplemente dejamos a un lado nuestro individuo y en la confusión e incluso en la pérdida de nuestra individualidad, nos dejamos guiar por el sistema. Cualquier ideología, sistema o doctrina de la actualidad, se ha vuelto lo más importante. Todos tenemos la necesidad de identificarnos con algún grupo para evadirnos de la realidad. Si no sigues a alguien o comulgas o estás afiliado o te identificas con...eres un extraño. El sistema se ha tragado al individuo y el individuo no quiere ser rescatado, porque esa pertenencia al sistema le exime de elegir, los demás ya han elegido, el individuo solo tiene que sobrevivir. No debemos renunciar a la individualidad, al final la sociedad es eso, suma de individuos, pero de individuos no manipulables, no reutilizables, no moldeables. Nuestro sistema educativo también está basado en la repetición, por eso se desintegra. Individuos libres dispuestos a crear y a descubrir la verdad. Y no ser simplemente máquinas...

sábado, 30 de julio de 2016

Y con ellos vino la reválida

Con permiso de Tonucci
Cuando los ignorantes piensan que la calidad de la educación es proporcional al número de exámenes que puedes superar, pasa esto. Cuando los que elaboran leyes de educación lo hacen como el que hace churros y luego cierran el chiringuito, los ojos y los oídos y se van a París, pasa esto. Cuando el partido que gobierna utiliza el poder para aumentar su poder personal riéndose de los intereses de los ciudadanos a los que representa, y además un considerable número de esos ciudadanos que han sido motivo de burla le vuelve a votar, pasa esto. Cuando desconocen el mecanismo de la inteligencia, del aprendizaje, del conocimiento en general y el concepto sistema educativo les queda grande, pasa esto. Con esta gente, siempre pasa esto! 
Un día de estos tengo que sentarme en el Congreso, nuestra casa y llenar bancadas y paredes de valores, de historias, de grandes educadores y grandes alumnos, de espacios alternativos, de reflexión, de trabajo cooperativo, de autoevaluación crítica. Demasiados trajes caros y cabezas vacías llenan los escaños. Demasiada gente para hacer tan poco. Una dosis de educación de la buena no les vendría nada mal, pero con reválida. 
Este año de nuevo construiremos barricadas y gritaremos para sordos, alguien escuchará.
¡Compañeros educadores nos están dando cicuta, brindemos y bebamos!. Mejor aún, brindemos y esperemos a que den ellos el primer trago.

jueves, 28 de julio de 2016

Diversión recortada en Badajoz

Foto de Castelar esta mañana
En este espacio está la mitad del presupuesto que ha destinado este verano el ayuntamiento de Badajoz para los talleres de animación en el parque de Castelar: NADA.
Supongo que al haber reducido al menos un 50% la inversión en talleres para niños, en materiales y en monitores también nos cobrarán a todos los ciudadanos la mitad de los impuestos correspondientes a la partida destinada a estos eventos. Imagino también que desde el ayuntamiento habrán dicho a la mitad de los niños pacenses que no vayan, que soporten su mitad de calor en sus casas y su mitad de aburrimiento. Es de esperar también, que los concejales y alcalde de Badajoz hayan reducido a la mitad sus vacaciones, porque habrán tenido que reducir sus sueldos a la mitad para adaptarse a este verano recortado que están sufriendo los niños. O quizá estoy mal informada y han decidido llevarse a la mitad de los niños que no pueden salir de Badajoz en verano porque sus ingresos no se lo permiten a un lugar más fresquito y que se corresponda con lo que pagamos todos por mantener en pie esta ciudad amablemente. Es gracioso que tengamos que aguantar semejante cagada aquellos a quienes nuestro espíritu nos prohíbe meter la papeleta del partido popular en las urnas y aquellos que si la metieron. Que cada uno soporte su mitad señores.



martes, 26 de julio de 2016

Ya sabéis lo que es la libertad, ahora os toca saborearla.

No están todos, van volando poco a poco.
(Enlace del blog de Elena, incluye cabreos
http://thinkabouttheworld.simplesite.com/423800105)
He disfrutado durante tres años de una hornada de alumnos/as especiales de los que este año he tenido que despedirme, porque por fin salen del recinto del instituto, de los límites del pueblo, rompen con sus rutinarias vidas y vuelan a la universidad y al mundo. De entre ellos se va la caótica Elena, su silencio me ha acompañado como un dulce abrazo desde que la conocí el primer año en primera fila, en un aula creada para suspirar. Sé que al principio me miraba con desconcierto, en realidad soy una loca que se hizo filósofa-educadora y triunfó. Y aunque ya no volvió a estar en primera fila -porque creó la distancia necesaria para verlo y sentirlo todo- cada día estábamos más cerca. Elena ha compartido conmigo sus crisis existenciales, su adolescencia inconformista, sus escritos cabreados, sus éxitos incontenibles y lo que ella ha considerado fracasos académicos por mucho que yo le diga que sólo son números que no miden la humanidad, ni la honestidad, ni los valores, ni la belleza, ni los intensos pensamientos que hay en su cabeza desde por la mañana temprano. Siempre con los ojos bien abiertos para no perderse y  ves cariño... ¡no te has perdido! 
Sé que me has escuchado siempre con atención, aunque te hiciese llorar. Sé que te he provocado más de un dolor de cabeza, te he visto sufrir por mis palabras. Sé que me quieres como yo te quiero. 

jueves, 14 de julio de 2016

Churros con chocolate y tiempo

La vida en los pueblos tiene otro ritmo, se mueve por otros principios y permite desarrollar estrategias de felicidad más o menos permanentes. Soy de un pueblo de Extremadura, pequeño y con pequeñas costumbres que cada vez que voy me regala pequeños momentos extraordinarios. Estuve el martes y participé de un evento social que cuando lo cuento puede parecer chistoso e incluso como de otro tiempo, pero que para mi ha sido entrañable, diferente e intenso. En mi pueblo ya no hay churrería, entre otras cosas, y desde hace un tiempo hay un churrero ambulante que va todos los martes se instala en una plaza del pueblo y hace churros. Los martes todo el pueblo cena churros con chocolate o café repartiéndose por los bares del pueblo espontáneamente para que no falten parroquianos. El churrero se convierte así en el facilitador de un gran acontecimiento social. Gracias a ese martes se reúnen familias, se juntan amigos y amigas, los grupos de vecinos se organizan y comparten un objetivo común: el mismo espacio, la misma mesa, las mismas charlas. Se suceden saludos y preguntas entre churro y churro. Yo estuve este martes con mi hija en el pueblo y compramos churros y nos sentamos con la familia a cenar y saludé a mis amigas de siempre, las que no caducan aunque la vida te separe físicamente de ellas y siempre es como si no me fuese nunca de mi pueblo. Martes tras martes se repite esta pequeña fiesta en la que cabemos todos a medida que vamos llegando y donde no sobra nadie ni si quiera los que se han ido...

lunes, 4 de julio de 2016

Soy libre

Mi hija de 10 años al terminar el curso me ha dicho ¡¡mamá soy libre!!. Libre de deberes programados e inservibles muchas veces, repetitivos y aburridos - varias veces le sugerí a su maestra la palabra creatividad-; libre de un horario inflexible que no perdona un minuto; libre de una maestra obsoleta que no sabe enganchar a los niños con hermosas historias sobre el mundo y sus acontecimientos, sobre la naturaleza y la poesía. Menos mal que su padre y yo exploramos su fantasía y le contamos mil cosas y experimentamos mil cosas junto a ella. 
Mi hija de 10 años se enfrenta a un verano sin cadenas, dispuesta a disfrutar de todo, a leer lo que le gusta "Junie B. Jones y el monstruo bajo la cama", a escribir en su recién estrenado blog lavidadeevaes.blogspot.com todas sus ocurrencias de niña de 10 años, a jugar a sus videojuegos favoritos, tocar el piano, bailar, cocinar y disfrutar de su bien ganada libertad.
Pero hay otros niños que no serán libres, porque no habrán sacado buenas notas y tendrán que continuar con su condena veraniega en clases o academias o haciendo deberes para poder seguir el ritmo frustrante de aprendizaje que el curso que viene de nuevo les marcará. Lo más triste es que sus padres están convencidos de la importancia de seguir malgastando las energías de sus hijos en estos menesteres. ¡Por favor, déjenles ser libres este verano que luego será tarde para seguir ejerciendo de niño sin más!