viernes, 1 de noviembre de 2019

Día de santos

En Ruanes un día de familia, migas y sol
Las mejores reuniones tienen lugar cuando no son planeadas. Hoy hemos jugado con la improvisación, desde que nos hemos encontrado en el cementerio de Ruanes, hasta que nos hemos despedido a media tarde.
En el cementerio, visita obligada por ser hoy el día de todos los santos: flores, velas, recuerdos, echar de menos a los que se fueron y a los que no pueden estar. Repasar las lápidas, como si en esa búsqueda pudiésemos borrar los nombres de nuestros muertos y resucitarnos. La familia siempre imprescindible y adorable. Esa familia que aunque esté lejos y tengamos que reconocernos de nuevo, te abraza como si te hubiese visto ayer.  A continuación cerveza en el único bar del pueblo. Añoranzas, correr para ver quien paga primero, sin pereza por pagar. Generosos con su tiempo y sonrientes. La segunda parada son unas riquísimas migas para que coma todo el pueblo y que permiten que comamos en familia, con los nuestros, con los amigos y conocidos de siempre, que deciden volver en estos días de recuerdos.
Una foto sincera. Los que no están se presienten en algunos rostros. Un café variado para terminar la tarde y buena conversación. Hablamos de las raíces, de los nuestros, de lo bien que estamos a pesar de los años, de que en esta familia hay buenos genes y como dice Mariti, hay buena gente.
Hemos quedado dentro de un año en el mismo sitio. Hasta entonces.